El vino albariño reúne a 200.000 personas en Cambados

Seguramente, el olor a vino aún impregnaba ayer las calles de Cambados (Pontevedra), que aún se recupera de pasar de apenas mil habitantes a 200.000 durante la semana pasada. El domingo, la LX Fiesta Rías Baixas Albariño echó el cierre por este año, con muy buenos resultados. Los miles de visitantes han podido disfrutar de los vinos ofrecidos por las 43 bodegas amparadas por la Denominación de Origen Rías Baixas.

En el Salón de Congresos y Exposiciones José Peña (antigua fábrica de la Conservera Peña) se instaló por segundo año el túnel del vino, un lugar para el aspecto más profesional. Los amantes de esta bebida pudieron degustar hasta 116 marcas, pertenecientes a 56 bodegas de la D.O. Rías Baixas, asesorados por miembros de la Asociación Gallega de Sumilleres (AGASU). Esta edición ha contado con la participación de 300 personas. En la XXIV Cata Concurso Rías Baixas Albariño, la marca Gundián se proclamó con el premio al mejor Albariño; plata y bronce recayeron en Rías Baixas Albariño Aravo y en Lagar de Costa.

El conselleiro de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, Alfonso Rueda, considera el evento como una “apuesta segura y una manera más tranquila de catar un vino y conocer la amplia variedad que ofrece la D.O. Rías Baixas”.

La organización estima que durante esta edición de la Fiesta do Albariño alrededor de 200.000 personas desfilaron por el Paseo da Calzada para degustar los vinos de la añada 2011, calificada como “muy buena”, y que las casetas vendieron más de 85.000 botellas de Rías Baixas.

El origen de esta fiesta se remonta a 1953, siendo una de las pioneras a nivel mundial, y nace fruto de una reunión de amigos que deciden competir por ver cuál de ellos elabora el mejor Albariño. En la actualidad, es una de las citas gastronómicas más populares y arraigadas de Galicia, en la que además de la degustación de vinos de la D.O. Rías Baixas en las casetas que se instalan a lo largo del Paseo da Calzada, existe variedad de actividades culturales y de ocio: cursos, conferencias, conciertos, pasacalles, folclore, verbenas… Las calles de esta pequeña villa marinera se llenan de colorido y alegría y se descorchan miles de botellas de este caldo fresco, suave y dulce, considerado como uno de los mejores vinos blancos de Europa.