Turismo activo para un San Valentín en pareja
Quizás seas de los que celebra San Valentín. O no… En cualquier caso, ¿no te parece la excusa perfecta para hacer algo divertido en pareja? Una escapada romántica, una cena especial o una joya son algunas de las opciones más típicas para celebrar este día. Pero si sois de los que les gusta la aventura y los deportes de riesgo, nada mejor que estas actividades de turismo activo para descargar adrenalina y disfrutar de un día inolvidable. ¿Te apuntas?
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Turismo activo en el aire
Parapente
¿Imaginas poder volar sobre tu ciudad? Y si a esto le añades la compañía de tu pareja, puede ser una experiencia diferente, ¿no crees? En la mayoría de las provincias de España hay varias empresas que se dedican a esto. Es muy sencillo porque además no se necesita ningún tipo de experiencia. Solo tendrás que montarte en el biplaza con el monitor y disfrutar de la experiencia. Descubre la ciudad desde un punto de vista totalmente diferente. Es una forma distinta de hacer turismo rural y disfrutar de ese día tan romántico de una manera diferente.
Tirolina
Muchos centros de actividades de multiaventura cuentan con esta práctica entre su oferta. Gran parte de ellos se encuentran en la naturaleza: sobre un río, entre montañas o en un profundo y ancho valle, así que ya te puedes imaginar la hermosura de paisajes que es posible encontrar. Aunque hay otro tipo de tirolina, situadas en la ciudad que últimamente también están muy de moda. Casi en el centro de España, en Toledo, está la tirolina más larga de Europa. Desde un punto de otro del río, cruza el Tajo con unas imágenes espectaculares. ¿Qué te parece si te llevas a tu pareja a la capital manchega y disfrutáis de ella?
Turismo activo en el agua
Hidrospeed
Quizá meternos en el agua ahora no sea lo más adecuado si no queremos coger un considerable constipado, pero a lo mejor si estás en Canarias, donde las temperaturas son más elevadas, te animas y lo haces. Sin ningún tipo de embarcación sobre la que subirte, en este deporte estás en contacto directo con el agua. Tiene características muy similares al rafting en cuanto a la equipación, pero en este caso, la persona va sobre un trineo flotante impulsándose con las aletas de buceo. Si os gustan este tipo de aventuras, San Valentín puede ser la excusa perfecta para que practiquéis hidrospeed.
Cañón acuático
Ocurre lo mismo que con la anterior. Quizá febrero no sea el mejor mes para hacerlo, pero para gustos los colores. Este descenso de barrancos te permite lanzarte por toboganes naturales, sifones, marmitas… Las empresas que ofrecen este tipo de actividades cuentan con un equipo totalmente preparado así como la licencia para que puedas hacer estas prácticas. Es un plan diferente y alternativo, ideal para vivir experiencias chulas con la pareja, ¿Qué te parece?
Turismo activo en tierra
Orientación
Las actividades de orientación están muy de moda. Para los que sean buenos en esto, puede suponerles un reto, y para los que la orientación brille por su ausencia, una buena oportunidad para aprender un poco sobre ella. Además de mejorar un poco más en este sentido, las actividades de orientación ayudan a conocer y descubrir más el paisaje en el que te encuentras, prestando mucha más atención a la vegetación y a los animales que habitan en ella. Pero cuidado, que si uno de vosotros es un poco despistado en esto, el otro no deberá enfadarse, recordad que es San Valentín y que no vale enfadarse.
Espeleología
Pero si preferís un poco más de aventura en vuestra escapada romántica por San Valentín, a lo mejor lo que estáis buscando es algo parecido a la espeleología. Esta actividad te adentra en el interior de las cuevas y las cavidades subterráneas. Descubrir todo lo que se oculta en ellas es una experiencia que quienes la han practicado no dudan en recomendar. Hay muchas federaciones y empresas que facilitan practicar esta actividad, busca cualquiera por tu zona y vete a hacer espeleología, ya verás lo divertido que puede llegar a ser.