Frías (Burgos) aspira a convertirse en destino de turismo rural gay

Ya no es noticia ni constituye ningún secreto el protagonismo que el turismo gay está adquiriendo en el mercado de nuestros días. Cada vez en mayor medida, el colectivo de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales demanda hoteles, casas rurales, restaurantes y establecimientos de los denominados Gay Friendly, en los que poder encontrar servicios de calidad dentro de un ambiente propicio a sus expectativas.

Como no podía ser de otra forma, la demanda del colectivo gay respecto al turismo rural también se está dejando sentir de forma gradual, máxime si consideramos que se trata de un segmento de mercado especialmente afín al contacto con la naturaleza, a los alojamientos con encanto, y siempre desde una perspectiva marcada por un poder adquisitivo medio-alto, como promedio.

El pequeño municipio de Frías, en la provincia de Burgos, es uno de los lugares que aspira a convertirse en destino Gay Friendly, en una de las primeras iniciativas específicas de turismo rural gay de nuestro país. La población de Frías, en Burgos, apenas cuenta con 275 vecinos, pero no faltan en el pueblo fuertes atractivos patrimoniales, como su recio castillo, amén del innegable encanto de los pequeños pueblos más o menos remotos y monumentales de Castilla y León. De la misma forma, Frías también dispone de su propia oferta de hostelería y casas rurales.

Pues bien, los responsables municipales de Frías están decididos a que su pueblo sea punto de referencia y destino para el turismo rural gay y ya han iniciado los trabajos de promoción para colocar al pueblo en el mapa Gay Friendly.