Parques Nacionales y hoteles de lujo, la mejor combinación

En España tenemos la inmensa suerte de contar con una amplia red de Parques Nacionales que ofrecen a turistas y autóctonos unos excelentes espacios en los que disfrutar de espectaculares espacios protegidos.

Como no podía ser de otra forma, gran parte del turismo que se mueve dentro del país se desplaza en busca de estos enclaves ansiosos por descubrir las increíbles maravillas que algunos de estos parajes ofrecen, alejándose del ruido y estrés de las ciudades.

 

La Red de Parques Nacionales es un sistema integrado que se dedica a la conservación y gestión de estos espacios. Su objetivo no es sólo evitar que la acción del ser humano afecte y altere su equilibrio natural, sino también posibilitar su uso público de forma controlada, formar a los profesionales destinados a proyectos internacionales y las importantísimas funciones de investigación y concienciación sobre la necesidad de conservar la naturaleza.

Los Parques Nacionales deben cumplir una serie de características para ser incluidos en esta exclusiva lista de la que forman parte tan sólo 15 parques en toda España. Deben ser espacios poco alterados por la mano del hombre, ser representativos del sistema natural al que pertenecen, con una extensión suficiente para permitir que se produzcan los procesos ecológicos y la evolución natural.

Salvo casos excepcionales el territorio protegido debe ser continuo, es decir, no tener enclavados ni elementos de fragmentación que rompan la armonía del ecosistema, y estar rodeado por un espacio que sea susceptible de ser declarado como zona periférica de protección.

España fue uno de los primeros países en tomar conciencia sobre la necesidad de tomar medidas para mantener este tipo de áreas. En 1916 se convirtió en un pionero europeo en esta materia con la creación de la primera Ley de Parques Nacionales, y dos años más tarde incluyéndose los dos primeros miembros de la lista, el Parque Nacional de la Montaña de Covadonga (actualmente de Los Picos de Europa) y el de Ordesa, durante años solos en este listado hasta 1954, cuando se incluyeron los del Teide y  y Caldera de Taburiente, ambos en las Islas Canarias.

El Parque Nacional Picos de Europa cuenta con una extensión de 67.455 hectáreas y se encuentra en la parte central de la Cordillera Cantábrica. Su territorio se extiende por las provincias de Cantábria, León y Asturias y se trata del segundo Parque Nacional más visitado de España por detrás del Parque Nacional del Teide y cuenta con otros espacios de protección al estar catalogado también como Zona de Especial Protección para las Aves, Lugar de Interés Comunitario y Reserva de la Bioesfera.

Dentro del parque se pueden realizar varias rutas y actividades al aire libre como senderismo por antiguas calzadas romanas y caminos secretos usados por maquis y guerrilleros durante años, rutas en bicicleta de montaña o esquí de travesía, que permiten explorar la zona y alcanzar algunos de los puntos de mayor relevancia como los nacimientos de los ríos Dobra, Cares y Sella, los Lagos de Covadonga o alguno de los más de 200 picos de más de 2.000 metros de altura.

Aquellos deseosos de conocer este maravilloso espacio cuentan con dos magnificas opciones para su alojamiento como son La Casona de la Abamia y El Bosque de la Anjana, dos magníficos hoteles enclavados en espacios muy próximos al Parque Nacional de Los Picos de Europa que ofrecen todas las comodidades para poder explorar la zona y descubrir todas las maravillas naturales que esconde.

El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido es el segundo parque nacional más antiguo de España y se encuentra en el Pirineo Oscense, en la provincia de Aragón. Cuenta con una superficie de 15.608 hectáreas, además de las 19.679 hectáreas de la Zona de Protección Periférica en las que destaca el macizo de las Tres Sorores, Treserols, el macizo calcáreo más alto de Europa. El Monte Perdido es el pico más elevado de esta formación, y desde la cima descienden crestas montañosas y espectaculares valles glaciares como por ejemplo el Valle de Ordesa, recorrido por el río Arazas.

La presencia de ríos como el propio Arazas, el Bellós o el Yaga provoca de la formación de numerosos valles que ofrecen un magnifico escenario para pasear por la naturaleza observando los ejemplares de buitres negros, águilas reales, buitres leonados o urogallos, y también la posibilidad de practicar actividades acuáticas como piragüismo, rafting o descenso de barrancos.

La enorme variedad de fauna y flora y la orografia le han hecho obtener las calificaciones de Zona de Especial Protección para las Aves, Lugar de Importancia Comunitaria, Reserva de la Bioesfera y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997. Entre las opciones para alojarse por los alrededores de este Parque Nacional destaca el Parador de Turismo de Bielsa, cuyo hotel ofrece un refugio en pleno Valle de Pineta desde el que explorar la región y llevar a cabo un buen número de actividades y deportes al aire libre en plena naturaleza.

El último de los Parque Nacionales de los que vamos a hablar es el Parque Nacional del Teide, el tercero por orden de antigüedad y el primero entre los más visitados de España y de Europa

Fue declarado en el año 2007 Patrimonio de las Humanidad por la Unesco y en ese mismo año se le incluyo en la lista de los 12 Tesoros de España junto con maravillas como la Alhambra, la Mezquita de Córdoba o la cuevas de Altamira.

Los 189.9 kilómetros cuadrados que ocupa el parque se encuentran en la zona más alta de la isla de Tenerife y se pueden visitar dos de los montes más altos de España como son el Pico Viejo, de 3.135 metros, y el Teide, que con sus 3.718 metros es el pico más alto de toda España y el tercer volcán más grande del mundo desde su base en el lecho oceánico.

La altitud y la presencia de varios picos ofrece un escenario ideal para los amantes del senderismo y el montañismo, al poder encontrar caminos y rutas que suponen todo un reto, ademas de por supuesto disfrutar de todas las opciones de ocio y actividades al aire libre que ofrece este espacio, no sólo de montaña, si no también con numerosas playas.

Para disfrutar de este escenario de ensueño con todo lujo de detalles, una opción más que recomendable es alojarse en el magnifico hotel Regency Country Club, en el sur de la isla de Tenerife, a tan sólo 5 minutos de la playa de Los Cristianos y la playa de las Vistas en el que , en un ambiente relajado con decoración inspirada en la isla de Bali se pueden acceder en pocos minutos a todas las maravillas del Parque Nacional del Teide.

Nos hemos querido centrar en los 3 Parque Nacionales de mayor antigüedad de España, pero la lista podría extenderse mucho más, afortunadamente. No es por tanto necesario viajar a lugares exóticos a miles de kilómetros para encontrar espacios alejados de la ano del hombre, pero para poder seguir disfrutando de los que aún conservamos en España hay que concienciarse de su valor incalculable y mantener unas políticas que favorezcan dicha conservación.