¿Kilos de más? Combátelos con nuestras propuestas
Has hecho todo lo que estaba en tu mano, pero las celebraciones navideñas han sido largas, la comida abundante y tu fondo de armario ha notado que se han relajado tus hábitos saludables. No desesperes, nos pasa a todos. Ahora toca ponerse las pilas para recuperar la silueta: comer más sano, hacer un poquito más de ejercicio e, incluso, introducir algún plus.
Por estas fechas, los gimnasios se llenan de propósitos de Año Nuevo y de damnificados de la gastronomía navideña, de la que hablamos hace unos días. Sin embargo, no hay que ‘matarse’ para reponerse. Es más, pasar de cero a cien no es nada recomendable.
Los expertos recomiendan reforzar el consumo de alimentos diuréticos y ricos en fibra, incrementar ligeramente la actividad física, beber mucha agua y, sobre todo, no obsesionarse, que la salud es lo primero. Un poco de turismo activo puede ser la solución perfecta para moverse un poco y, a la vez, divertirse: montar a caballo, rutas en bicicleta y un largo etcétera. Otra opción es aprovechar que hay numerosos hoteles con gimnasio y dedicar media horita a ponerse en forma antes o después de disfrutar del fantástico entorno que seguro que te rodea.
Una buena forma de complementar tu ‘plan de acción’ y de mimarte un poco, que nunca está de más, consiste en incluir tratamientos como los masajes reductores en las zonas que requieran especial atención. Gracias a sus movimientos, los masajes ayudar a reducir los depósitos grasos del cuerpo y a mejorar la circulación. Se trata de una solución completamente natural que, además, ayuda a combatir la celulitis.
Como ya hemos dicho, son un complemento a una dieta equilibrada y al ejercicio diario, lo cual no significa pasar hambre ni torturarse, pero tampoco darse el atracón y confiar en un masaje milagroso. Para ello, lo mejor, sin duda, es recurrir a las manos de un experto. Y, como hablábamos de mimarnos, ¿qué mejor plan que una escapada a un hotel con SPA y dejar que sus profesionales nos ayuden a recuperar el tono tras las celebraciones? Tratamientos faciales y corporales, programas con productos naturales (chocolaterapia, oleoterapia, vinoterapia, cafeterapia…), masajes para renovarse por dentro y por fuera… Todo un lujo, ¿por qué resistirse?