Hoteles con encanto fuera de la ciudad
¿Quieres estar en un entorno rural pero con las características y servicios que sólo los hoteles son capaces de ofrecer? Tenemos la solución, para eso están los hoteles rurales, alojamientos que normalmente tienen capacidad para pocas personas, lo que te aseguran una privacidad y una intimidad que las grandes cadenas hoteleras no tienen. Te presentamos, por eso, cinco hoteles rurales que no te puedes perder.
L´Hort de Sant Cebriá (Torroella de Fluvia, Girona)
En un paraje inconfundible e inigualable, este hotel rural es el lugar perfecto para una escapada en pareja. Disfrutar ambos de unas instalaciones renovadas y con encanto es algo que no podrás encontrar en muchos lugares. Sal caminar por los alrededores y encuéntrate con un espacio natural inigualable. La construcción recuerda a las casas rurales tradicionales, pero sabes que aquí contarás con los servicios propios de un hotel.
La Casa del Puente (Regules de Soba, Cantabria)
Desde 1900 esta casa ha servido para dar un cálido y cómodo alojamiento. El río que circula muy próximo al hotel otorga ese encanto especial a la zona. Es tal la cercanía del cauce que, en los días más silenciosos, cuando el aire apenas se hace presente, podrás escuchar desde la cama el circular del agua. En plena naturaleza donde el verde será el más absoluto protagonista, podrás descansar sin que nadie interrumpa tus momentos de pleno reposo.
Tierras de Moya (Moya, Cuenca)
De nuevo las piedras son las protagonistas de un hotel rural. Su forma, su textura, su color son las encargadas de otorgarnos esa sensación de tranquilidad que sólo ella es capaz de conceder. Además, este alojamiento se ubica en la pacífica localidad de Moya, un municipio de tan sólo 200 habitantes donde en las calles reina el silencio y a través de las cuáles, podrás disfrutar de un pequeño pueblecito con encanto. El hotel dispone de unas habitaciones cómodas e inigualables y además te da la posibilidad de que elabores tus propios platos en la cocina.
El Cerezal de los Sotos (Jerte, Cáceres)
Dicen que el florecimiento del Valle del Jerte es uno de los acontecimientos naturales más bonitos del inicio de la temporada primaveral. Pero lo que es cierto es que se trata de una localidad especial, sea cual sea el momento del año en la que la visites. Y no menos encantadores son sus hoteles. En éste tendrás la posibilidad de descansar durante tu escapada y hacerlo bajo la luz de la chimenea en invierno o refrescándote en la piscina durante el verano. Además su capacidad total, de 12 personas máximo, te dará ese toque de intimidad y privacidad que probablemente vayas buscando.
Arantza Hotela (Arantza, Navarra)
Describir este hotel con palabras probablemente sea imposible. Belleza, diseño, encanto y sobre todo, unas vistas maravillosas es lo que te llevarás de recuerdo. Imagina darte un baño frente a un gran ventanal desde el cual se pueden ver hermosos paisajes de un valle plagado de vegetación. El silencio y la tranquilidad te acompañarán durante toda tu estancia, asique no retrases más tu reserva o te lo quitarán de las manos.
