Quince días del mes de agosto fantásticos. La casa especialmente diseñada para la comodidad .La ubicación perfecta para largas caminatas. Reseñable el silencio nocturno, perfecto para el descanso. El pueblo y sus habitantes, especialmente entrañables y hospitalarios. Mención aparte merecen los dueños, muy agradables en el trato y siempre atentos a las necesidades que pudiéramos tener en el día a día. Veraneo tranquilo y pleno de excursiones por lugares todavía sin masificar....justo lo que buscaba. Gracias.
Hemos estado un grupo de amigos y nuestras mascotas y lo hemos pasado genial. La casa muy chula y acogedora. No nos ha faltado de nada para disfrutar de la misma. El jardín aunque no está pegado a la casa, son 30 metros, vamos! al lado y muy bonito, con todo lo necesario para disfrutar de una barbacoa, con un cenador para protegerte del sol o lluvia, mesa, sillas...y cercado para tener privacidad. Los propietarios Jose Luis y su esposa, muy amables, atentos para cualquier cosa que necesitásemos. Muchas gracias a los dos y Sigueruelo nos ha encantado.
Recomendable desde todos los puntos de vista.