Jamón ibérico, el rey de la mesa

Te proponemos una exquisita ruta que no deja a nadie indiferente. El jamón ibérico se ha consagrado como símbolo del buen gusto. Es un imprescindible de las ocasiones especiales, que nunca sobra en la mesa española. Si tú también eres “de buen comer”, no pierdas detalle:

• En Extremadura, encontramos extensas dehesas, donde nace, vive y muere el cerdo ibérico. Para que el cerdo pueda considerarse ibérico, debe alimentarse exclusivamente de bellotas y rastrojos. La Denominación de Origen “Dehesa de Extremadura” es sinónimo de calidad y se integra dentro de la Dieta Mediterránea. Te recomendamos fijar el punto de partida de la ruta del jamón ibérico en Jerez de los Caballeros, donde se celebra el Salón del Jamón durante la segunda semana de mayo. Tal es su popularidad que el jamón ibérico tiene su propia fiesta en Monesterio. En el mes de septiembre se invita a todos los asistentes a un suculento bocadillo de jamón. Solo pensarlo, ya abre el apetito.  Otros lugares que recomendamos visitar para degustar jamón ibérico son Oliva de la Frontera, Fregenal de la Sierra, donde se encuentran los mataderos más grandes de la zona, Higuera la Real, Segura de León, Cabeza la Vaca, Calera de León, Fuente de Cantos y por supuesto, Zafra, donde encontramos algunos de los restaurantes más selectos donde deleitarnos con este plato tan rico.

• Exquisito es el jamón ibérico que se prepara en Córdoba, concretamente en la comarca de Los Pedroches, donde se encuentra la mayor dehesa de encinar de Europa. El visitante encontrará tres tipos de jamones: de bellota, de recebo, y de cebo. Todos los cerdos son de raza ibérica y existe una amplia variedad, que va desde las paletas, hasta el chorizo, pasando por la morcilla y el jamón.

• El jamón que se elabora en la Sierra de Huelva es muy peculiar. El cerdo se cría en libertad y se alimenta de bellotas y de los pastos naturales en la dehesa. De ahí sale el jamón de jabugo, que aunque no constituye Denominación de Origen propia, hace referencia a la población donde se produce y que se reconoce internacionalmente por su excelencia.

• En la ruta del jamón ibérico no podemos olvidar a la comarca salmantina de Guijuelo, cuyas sus raíces están ligadas al cerdo. Su Denominación de Origen se remonta a 1984 e incluye jamones y paletas de cerdos ibéricos. Más de la mitad de la producción española de jamón ibérico procede de Guijuelo. Se distingue por su pezuña negra,  tocino brillante y dorado y un sabor poco salado, casi dulce, y por supuesto un aroma inconfundible, fragante

Esperamos que disfrutes de esta preciada ruta, donde se mezcla el sabor único de la gastronomía española y la máxima calidad.