Qué ver en La Torre De Fontaubella
Municipio del Priorat situado en el extremo sureste de la comarca, limítrofe con el Baix Camp. Se encuentra en la cabecera de la riera de Marçà, al mismo pie de la Mola de Colldejou. El término, como todos los que están situados alrededor de la Sierra de l´Argentera, presenta muchos accidentes geogràficos, y su extensión es muy reducida (5,05 Km²).
La villa está situada a 369 metros de altitud. Se encuentra al norte del territorio, a la izquierda de la riera de Marçà. El barranco de Les Castellanes pasa por el pueblo, urbanizado como un paseo, y ha sido motivo de litigio con Pradell de la Teixeta desde el siglo XIX, ya que las casas construidas al otro lado del barranco que recibían el nombre de "Barri de Pradell" se habían considerado siempre pertenecientes a La Torre, de la cual recibían todos los servicios, pero estaban situadas dentro del término de Pradell.
A pesar de ser una población pequeña, su historia es bastante antigua dado que el paso natural de la riera de Marçà ha sido siempre el paso entre el Priorat y el Camp. El historiador Asens especuló con la posibilidad de la existencia de un "castrum" o campamento romano en el lugar donde hoy está la torre.
Originariamente, la población estuvo situada en un barranco conocido con el nombre de "Fontes Aubelles", donde todavía hoy permanecen unas ruinas conocidas como "La Casota", que son unas construcciones partoriles hechas con piedra seca. En el lugar donde hoy está el pueblo, existía La Torre de Rafolí, atribuida a los tiempos moros, pero que podría tener incluso un origen más antiguo. Al trasladarse al poblado antiguo cerca de esta torre, se empieza a hablar de La Torre de Fontaubella. El origen del nombre proviene de La Torre y de Albella, forma etimológoca que significa "Corriente subterránea", nombre adecuado ya que la geología confirma la existencia de un río subterráneo debajo de esta localidad.
La Torre de Fontaubella estuvo vinculada desde un principio a la Baronía de los monjes agustinos de Escornalbou, hasta que la absorción por la Mitra de las rentas de la Bornia hizo que las de La Torre se aplicasen al Seminario Conciliar de Tarragona desde el siglo XVI.
A partir del siglo XVII participó como miembro de la Comuna del Camp y se reafirmó como partidaria del Archiduque Carlos en 1710, en una de las últimas reuniones comuneras hechas a lo largo de la guerra.
El número de vecinos fue desde siempre bastante reducido. Un aumento importante tuvo lugar en la segunda mitad del siglo XIX. El desastre de la filoxera hizo decrecer la población hasta unos límites que actualmente se pueden considerar de supervivencia.
Cabe destacar que en el año 1955 la Diputación le concedió los beneficios del "Día del Municipio Rural". A pesar de ser un pueblo pequeño, es uno de los mejor atendidos de la comarca.
