Qué ver en La Palma D'ebre

Municipio de la Ribera d´Ébre situado en el sector más alto y septentrional de la comarca, al limite con les Garrigues, de la cual les separa una estrecha franja del término de Flix, i al límite también con el Priorato. El término municipal tiene una extensión de 38,31 Km2 y es atravesado por la Vall Major. La hidrografía esta representada por numerosas fuentes y pozos de agua, esparcidos por el término.

El pueblo se encuentra a 335 metros de altitud entre la Vall de les Peces y el barranco de la Font Vella, y es el único núcleo de población.

No se tiene noticia exacta de la fundación del pueblo, aunque existen muchos vestigios de la época de la denominación árabe, cosa que hace pensar que el pueblo ya existía en esas fechas.

El primer documento sobre la población data de 1262, cuando Jaime I y Teresa Gil de Vidaure, otorgan acta de venta del castillo de Flix y del lugar de la Palma, en favor d´Arnal de Bosc.

A principios del siglo XIV, la Palma era gobernada por el Comendador de Ascó, perteneciente a la castellanía de Tortosa. Quedó bajo el dominio de los Hospitalaris en 1318, al hacerse cargo de esta Orden del gran Priorat de Catalunya.

En el año 1399, Barcelona compró las baronías de Flix y de la Palma, que estuvieron bajo su dominio durante los siglos XV,XVI y XVII, con excepción de los años 1462 al 1472, durante las guerras contra Joan II que estuvieron bajo el dominio d´ Alfons d´Aragó. Esta posesión era importante para Barcelona. La razón principal era su lugar estratégico: ambos términos estaban situados en sendos lados del río Ebro, dominando el paso de las diversas mercancías que navegaban por el río y evitando acudir a Tortosa, dónde se cobraban fuertes impuestos por el transporte.

Durante la Guerra del Segadors, Barcelona pierde el dominio sobre Flix y la Palma, y el pueblo se ve implicado en diversas alternativas bélicas.

En 1670, Flix y la Palma son devueltas a Barcelona, pero las perderá en 1673.

Del siglo XVIII y posteriores no existen noticias documentales, debido a la quema de los archivos locales, durante los años 1810 y 1936.