Hace casi dos años que conocí el centro rural del Cerrete de Haro y la verdad es que es una experiencia única. Encontrar un sitio donde confluya ocio, cultura, naturaleza, gastronomía y sobre todo la calidad del servicio, unas instalaciones estupendas y un trato hacia el cliente excepcional. Pocos sitios reúnen estas condiciones. Volvería una y mil veces.