Magnífica casa para relajarse y pasar un fin de semana muy divertido y agradable.
La casa está genial! Es enorme y está muy bien decorada. Se nota que han puesto mucho cariño al remodelarla.
Tiene de todo, incluida barbacoa (eléctrica, así que más rápido para empezar a cocinar y el sabor de a la parrilla no se pierde) así que es muy cómodo ir sólo con la maleta de ropa y empezar a disfrutar.
Fuimos un grupo de amigos y nos hemos propuesto volver en unos meses, con mejor tiempo para poder disfrutar también de la piscina. En esta ocasión no ibamos con niños, pero al ser tan amplia y tener tanto patio, es perfecta para ir también con ellos.
El pueblo está muy cerca, por lo que el pan, la carne para la barbacoa y demás se puede conseguir alli, ya que hay panaderia y un pequeño supermercado. Al estar tan cerca de Madrid permite hacer una escapada de fin de semana sin perder demasiado tiempo en el desplazamiento.
Pero lo mejor es que la casa no está en el mismo pueblo, sino a las afueras, por lo que la intimidad y tranquilidad es absoluta. Al tener un patio y un salón tan amplio, es muy cómodo para grandes grupos, tanto si hace buen tiempo como si no. Super agradable estar en el salón con los amigos y la chimenea encendida :-)
Los alrededores son pinares muy agradables por los que pasear.
Merchina es muy amable y fue muy agradable tratar con ella, todo facilidades. Sin duda, volveremos.
La casa está genial! Es enorme y está muy bien decorada. Se nota que han puesto mucho cariño al remodelarla.
Tiene de todo, incluida barbacoa (eléctrica, así que más rápido para empezar a cocinar y el sabor de a la parrilla no se pierde) así que es muy cómodo ir sólo con la maleta de ropa y empezar a disfrutar.
Fuimos un grupo de amigos y nos hemos propuesto volver en unos meses, con mejor tiempo para poder disfrutar también de la piscina. En esta ocasión no ibamos con niños, pero al ser tan amplia y tener tanto patio, es perfecta para ir también con ellos.
El pueblo está muy cerca, por lo que el pan, la carne para la barbacoa y demás se puede conseguir alli, ya que hay panaderia y un pequeño supermercado. Al estar tan cerca de Madrid permite hacer una escapada de fin de semana sin perder demasiado tiempo en el desplazamiento.
Pero lo mejor es que la casa no está en el mismo pueblo, sino a las afueras, por lo que la intimidad y tranquilidad es absoluta. Al tener un patio y un salón tan amplio, es muy cómodo para grandes grupos, tanto si hace buen tiempo como si no. Super agradable estar en el salón con los amigos y la chimenea encendida :-)
Los alrededores son pinares muy agradables por los que pasear.
Merchina es muy amable y fue muy agradable tratar con ella, todo facilidades. Sin duda, volveremos.