La Masía es muy bonita y rural. Muy bien cuidada y dispone de todas las comodidades que se pueda necesita. Está en pleno corazón de la montaña, lo cuál es totalmente relajante, desestresante y con unas vistas extraordnarias. Hicimos varias rutas caminando (la masía dispone de varios folletos explictrivos con excursiones). Marcelo fue en todo momento muy atento y agradable con nosotros. Hemos disfrutado mucho nuestra estancia. Éramos un grupo de 8 personas y teníamos mucho espacio. Dispone de 3 habitaciones de matrimonio, de 2 camas supletorias y en cada habitación un lavabo. Hay un total de 4 lavabos. EL coemdor y la cocina son realmente grandes! Y la piscina está muy bien y la hemso disfrutado como enanos.
Recomiendo totalmente esta masia y sé que volveremos a repetir.
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