Magnifica casa rural para disfrutar de lo autentico. Está frente a la montaña por lo que las vistas son fantasticas, no le falta ni un sólo detalle para sentirte como en casa y despertar viendo esas vigas de castaño y poner los pies en ese suelo de pizarra tan limpio, la verdad es una sensación muy buena. Alejandro, el dueño, nos recomendo varias rutas de senderismo y nos facilito mapas, bastones, mochilas, camtimploras etc., y la verdad es que todas las rutas eran bonitas, sin embargo, os quiero recomendar la que va por el río pues tiene un paisaje idílico. En resumen, que nos encantó la casa y sus alrededores, el pueblo tambien precioso.