Estancia increíble en Mas Pineda. El entorno y la masía son excepcionales, y Laia nos atendió de manera cálida y excelente, siempre pendiente de cualquier necesidad. Las cenas caseras en su cocina y la paz que se siente en el exterior, junto con momentos de lectura junto a la chimenea, han sido inolvidables. Sin duda, volveremos.