La casa no solo es maravillosa desde el punto de vista arquitectónico, sino que también está impecablemente cuidada. El trato con Jesús fue excelente, y todo relacionado con el mobiliario y la limpieza es de primera categoría. El entorno es increíble, y se puede disfrutar en bicicleta, ya que la casa proporciona 10 bicis para su uso gratuito. Sin duda, volveremos.