La localización es inmejorable. A poca distancia a pie, se encuentran dos maravillosos senderos para explorar. Cerca hay un supermercado donde puedes comprar todo lo necesario, incluida una carnicería con deliciosas carnes de la sierra. Pero lo más destacado es si tienes una mascota, en mi caso un pastor alemán grande; la parcela cerrada permite que el animal disfrute corriendo junto a los niños. La barbacoa cerrada tipo horno le da un toque especial a las comidas al carbón.
La ubicación de la casa es ideal. Aunque está en las afueras del pueblo, todo está cerca en caso de necesitar algo. Hay una gasolinera y un supermercado cercanos, y el centro del pueblo está a media hora a pie. La finca me encantó, era más amplia y tenía más áreas verdes de lo que mostraban las fotos. Todo estaba cercado y seguro, lo que permitía soltar al perro con tranquilidad.
La serenidad del lugar, combinada con el estupendo clima, nos permitió disfrutar de un fin de semana encantador. José Antonio fue muy amable y atento, siempre dispuesto a ayudarnos si necesitábamos algo. La casa superó nuestras expectativas; solo lamentamos no haber podido aprovechar la temporada de piscina y disfrutar de esa área también.