La casa es estupenda, está equipada hasta el último detalle. La propietaria nos dejó una bandeja de ibéricos, pan, bebida y detalles para las niñas a nuestra llegada. Todo estaba en perfecto estado de limpieza y no tuvimos que preocuparnos por nada, ya que la casa contaba con todas las comodidades necesarias para la estancia. ¡Esperamos volver!