En primer lugar quiero saludar y agradecer el maravilloso trato que recibimos de los propietarios Emilio y María. Muy buenas personas que no voy a olvidar por su humildad, sencillez y generosidad, haciéndote sentir como si fueras de la familia. La casa preciosa, con todas las comodidades, situada en un lugar mágico, lleno de vistas impresionantes. Nos fuimos sin ganas de irnos de lo felices que hemos estado allí. Si queréis ir a una casa rural en Asturias os la recomiendo, la mejor elección, calidad, precio y trato; fácil acceso, en plena naturaleza y en un punto clave donde puedes desplazarte sin necesidad de recorrer muchos kilómetros tanto a pie como en coche los lugares más emblemáticos y hermosos. Es la segunda vez que he ido a Asturias y seguro que vuelvo a repetir. Gracias Emilio y María, cuidaros mucho y cuando podáis, tomaros esas vacaciones que tanto anhela Emilio.
Yo padecía de ansiedad, mareos y depresión pues.... se me ha ido, he venido nueva, más guapa, con las pilas cargadas y llena de ilusión, lo que no han conseguido los médicos. La mente hace estragos amigos. Así que, la mejor terapia es tomarse unas vacaciones para poder cambiar de aires. Va fenomenal!!
Yo padecía de ansiedad, mareos y depresión pues.... se me ha ido, he venido nueva, más guapa, con las pilas cargadas y llena de ilusión, lo que no han conseguido los médicos. La mente hace estragos amigos. Así que, la mejor terapia es tomarse unas vacaciones para poder cambiar de aires. Va fenomenal!!