Las casas de la Caleya (que son tres) están muy bien. Lo supera el lugar donde están, que es impresionante, en plenos Picos de Europa. Y lo mejora absolutamente la familia que lo regenta, que son muy agradables.
Hemos estado la semana pasada 20 personas, amigos y amigas con nuestros hijos e hijas.
Está cerca de Cangas de Onís, y cerca de lugares preciosos de la geografía asturiana.
Y la familia (Emilio, María y Patricia), es impresionante. Están en todo momento atentos a nuestras necesidades, pero son absolutamente discretos. Nos han dejado a nuestro ritmo, ofreciéndonos todo lo que tenían. Incluso nos han hecho unos dulces riquísimos que nos hemos comido entre todos.
Felicito a la familia por su buen hacer y por lo bien que tienen las casas de acogida. La relación calidad/precio es de las mejores.
Hemos estado la semana pasada 20 personas, amigos y amigas con nuestros hijos e hijas.
Está cerca de Cangas de Onís, y cerca de lugares preciosos de la geografía asturiana.
Y la familia (Emilio, María y Patricia), es impresionante. Están en todo momento atentos a nuestras necesidades, pero son absolutamente discretos. Nos han dejado a nuestro ritmo, ofreciéndonos todo lo que tenían. Incluso nos han hecho unos dulces riquísimos que nos hemos comido entre todos.
Felicito a la familia por su buen hacer y por lo bien que tienen las casas de acogida. La relación calidad/precio es de las mejores.