Duerme en una auténtica torre defensiva de època

Para impedir la entrada de Napoleón en el norte de Reino Unido, en la bahía de Dublín, se edificó un fuerte defensivo compuesto por 4 torres fortificadas. Un millón de ladrillos superpuestos con el objetivo de defender un territorio, que hoy se usa para albergar a turistas en busca de nuevas y originales experiencias. Un entorno tranquilo presidido por las luces y el paso de los pescadores de la zona, con unas vistas impresionantes al horizonte.
El Hotel Torre Martello fue reconstruida en 1971 con un claro objetivo: mantener el espíritu del lugar, ofreciendo las prestaciones necesarias para, a su vez, convertir el edificio en una buena elección a la hora de acoger a turistas. Este hotel con encanto ofrece dos habitaciones dobles, ambas con cocina incorporada. Elige bien a tus compañeros porque los dormitorios se ubican en el salón central y no quedan completamente divididos.
Un lugar idílico para disfrutar del mar, el viento y la costa alumbrados por la cálida luz que desprende la Reserva Natural de Orford Ness al caer la noche. A pesar de que estas construcciones evitaron la invasión francesa en su momento, la torre parece seguir en guardia, alerta ante las olas que rompen a sus pies y en expectantes ante un ataque que forma parte del pasado.