He tenido la suerte de haber podido disfrutar de La Oveja Verde y de las Alpujarras en tres ocasiones y las que me quedan. La primera vez hace 2 años y desde entonces La Oveja Verde siempre está en primera posición como opción de vacaciones. Un lugar especial, distinto, con unas vistas espectaculares, y unas instalaciones preciosas. Un jardín grande , muy cuidado y una piscina con agua natural. Apartamentos sencillos, pero con muy buen gusto, totalmente equipados y con una luz y unas vistas impresionantes. El trato muy cálido y cercano. Vamos un sitio de diez!!!