Situada en las estribaciones de Sierra Morena, entre los ríos Cala y Viar.
La existencia de canteras y minas en la zona han hecho que los poblamientos se dieran desde hace mucho tiempo. Los primeros restos se han hallado en uno de los yacimientos más importantes, "Los Covachos", y corresponden a los períodos neolítico y calcolítico.
Otros restos de interés se encuentran en el Conjunto Arqueológico La Traviesa, declarado por ley 16/85 del Patrimonio Histórico Español e inscrito en el catálogo de Yacimientos Arqueológicos de la Provincia de Sevilla.
Su origen como asentamiento humano proviene de los fenicios y los griegos. Pero mucho más importantes son los restos de las culturas romana y musulmana, donde el pueblo tuvo una enorme importancia, gracias a los citados yacimientos de plata, cobre y mármoles; incluso en la época romana se llego a acuñar moneda propia.
Su actual nombre proviene del árabe Al Medin Balat, que significa "Las Minas de la Calzada".
Tras la reconquista, Fernando III le concedió carta puebla y el derecho a tener un escudo propio.
Más tarde, los Reyes Católicos otorgaron a la villa el "título de leal" por el comportamiento tan valeroso en la conquista de Granada, y en la batalla de Bailén.