Qué ver en Catoira

Las afamadas Torres del Oeste de Catoira son el puntal de una zona emplazada en un rincón privilegiado de la ría de Padrón. Las torres son los restos del antiguo Castellum Honesti, ciudadela que fundó Alfonso V a comienzos del siglo XI para intentar detener el paso de los normandos en su intento de conquistar tierras gallegas. Donado por este monarca a la iglesia compostelana en 1204, fue reedificado por Cresconio y Diego Peláez en la primera y segunda mitad del siglo XI, respectivamente. En 1719 protegió el puerto padronés al interceptar el paso de los invasores ingleses aunque estas torres, declaradas Monumento Nacional tras los trabajos de restauración llevados a cabo a partir de 1970 por el Servicio de Defensa del Patrimonio Artístico, son atacadas todos los años por los vikingos en una fiesta que recuerda su importancia en la defensa de la comarca a lo largo de los siglos.
Ríos y riachuelos bañan una comarca de relieve accidentado en el que se hace dueño del paisaje el monte Xiabre desde sus 641 metros, que dominan el entorno. Los principales recursos económicos de Catoira los proporcionan la agricultura y la ganadería, además del aprovechamiento de los muchos bosques que hay en la zona. Fábricas de cerámica, ladrillos y tejas y otras industrias derivadas de la madera completan el modo de subsistencia de sus habitantes.