Pilar y Reinols son dos personas excelentes. Nos trataron con mucho cariño e incluso nos dieron la posibilidad de quedarnos un día más sin coste alguno si queríamos. La casa es acogedora y tranquila, y te la dejan con té y demás para que puedas disfrutar de una estancia maravillosa. Estamos pensando en volver pronto.