El lugar es encantador, tranquilo, sin ruidos y rodeado de naturaleza.
Tanto Ana como Fran nos trataron fenomenal. Tomar algo en el gastrobar por la tarde no tiene precio. Cerca en coche de Santander y se enlaza rápido con la autovia. Muy recomendable.
Tanto Ana como Fran nos trataron fenomenal. Tomar algo en el gastrobar por la tarde no tiene precio. Cerca en coche de Santander y se enlaza rápido con la autovia. Muy recomendable.