Muchas gracias a los propietarios por el trato tan agradable recibido, nos dieron un monton de aclaraciones sobre Cantabria. Decir que es un sitio de ensueño, despertarse en plena naturaleza rodeados de narajos, decir también que por el centro de la finca pasa un rio (es un lugar estupendo para leerse un buen libro en el puente o escuchar el agua). La casa está muy limpia y tiene todas las comodidades, no nos faltó de nada, incluso una chimenea de leña... sencillamente GENIAL!!! Pumu nuestro perro pudo correr por la finca al estar amurallada lo que le da también mucha intimidad... VOLVEREMOS!!!