Villa María es un lugar verdaderamente singular, con una casa imponente, confortable, y perfecta para reuniones con amigos. Cuenta con todas las facilidades necesarias, un entorno accesible y práctico tanto en términos de transporte como de servicios. La dueña fue muy atenta en todo momento. Si tuviera que destacar un punto a mejorar, diría que necesita un poco más de mantenimiento, dado que es una propiedad maravillosa. Disfrutamos mucho de nuestra estancia. Rosa.