Un hotel o casa rural donde disfrutamos de lo lindo, todo está muy bien cuidado, éramos un grupo grande y Julián su dueño es una persona encantadora que nos ayudó en todo momento.
Tiene un entorno muy bonito, no sólo la piscina sino también ahora que entra el otoño hay robles y castaños. Curiosamente también nos comentaron que se producían cerezas así que volveremos para probarlas.
Muy recomendable este alojamiento, saludos
Tiene un entorno muy bonito, no sólo la piscina sino también ahora que entra el otoño hay robles y castaños. Curiosamente también nos comentaron que se producían cerezas así que volveremos para probarlas.
Muy recomendable este alojamiento, saludos