La casa ha sido restaurada con gran esmero y estética. Los baños son muy espaciosos, modernos y limpios. La cocina es grande, completamente equipada y cocinamos mucho en ella. Tiene una mesa enorme para doce personas. La terraza de la entrada es fabulosa. El jardín es grande y está bien cuidado, al igual que el patio con sus diversos ambientes, bajo techo o en la sala de chimenea, donde pasamos un buen y cálido rato. Leo y Carmen hicieron todo lo posible para que la pasáramos bien. La recomiendo sinceramente.