Un alojamiento muy bonito, con espacios amplios y todo lujo de detalles y comodidades. Hemos pasado unos días n febrero y el salón con chimenea invita a quedarse mucho más que unos días. Nos gestionaron la reserva rápido con muy buena atención. Los propietarios encantadores y nos mantuvieron informados de qué visitar cerca, también nos regalaron unos dulces. Repetiremos.