Ya es la tercera vez que nos hemos alojado en Casa Blanca y cada año es mejor. Todos los años nos encontramos con mejoras y tengo que decir que es muy difícil mejorar ya que las instalaciones están genial.
Comentar que somos un grupo de 18 personas y es muy difícil, por no decir imposible que todos estemos de acuerdo en algo, pues tengo que reconocer que nadie mostró ninguna pega con el sitio al contrario, aquellos que vinieron por primera vez quedaron encantados. La única pega es que esta vez al ser ya en el mes de Octubre no pudimos disfrutar de la piscina que ya estaba cerrada desde Septiembre.
Para nuestro grupo lo que es fundamental es el salón de 70 m2, precioso! y una cocina perfectamente equipada y gigante ya que hacemos allí la vida y sólo vamos a las habitaciones a dormir o descansar de tanto niño ( este año fueron 8) y amenazamos con volver más.
Todas las habitaciones tienen el pack de sábanas y toallas recién lavadas y la limpieza está bastante bien para estar en el sitio que está.
Chabier es un encanto de persona y atento a más no poder, a nosotros ya nos conoce. Una pena que esta vez no pasase por la casa salvo al final para despedirnos. Nos debes una charla! ;)
Comentar que somos un grupo de 18 personas y es muy difícil, por no decir imposible que todos estemos de acuerdo en algo, pues tengo que reconocer que nadie mostró ninguna pega con el sitio al contrario, aquellos que vinieron por primera vez quedaron encantados. La única pega es que esta vez al ser ya en el mes de Octubre no pudimos disfrutar de la piscina que ya estaba cerrada desde Septiembre.
Para nuestro grupo lo que es fundamental es el salón de 70 m2, precioso! y una cocina perfectamente equipada y gigante ya que hacemos allí la vida y sólo vamos a las habitaciones a dormir o descansar de tanto niño ( este año fueron 8) y amenazamos con volver más.
Todas las habitaciones tienen el pack de sábanas y toallas recién lavadas y la limpieza está bastante bien para estar en el sitio que está.
Chabier es un encanto de persona y atento a más no poder, a nosotros ya nos conoce. Una pena que esta vez no pasase por la casa salvo al final para despedirnos. Nos debes una charla! ;)
Lo dicho, sin duda volveremos el año que viene