Fuimos a pasar unos días varias parejas con nuestros hijos y nos sentimos como en casa. El alojamiento está preciosa, reformada conservando la antiguedad.. preciosa y con todo lo necesario. Tiene aire acondicionado en las habitaciones, barbacoa, terraza donde se puede comer, y espacio en la zona de la piscina para disfrutarla al máximo. La ubicación es excelente, a muy poquito de las playas de Escala. La propietaria es encantadora y atenta en todo lo que necesitamos. Volveremos.