Con motivo del 80 cumpleaños de la abuela, elegimos esta casa para reunirnos la familia. Éramos unas 38 personas entre adultos y niños, y la verdad que no pudimos elegir un mejor alojamiento. La casa es enorme, con múltiples habitaciones y espacios comunes, a destacar la cocina campera porque permite estar todos juntos. Tiene salas de juegos para todas las edades y zonas verdes. Nosotros no hemos ido en temporada de calor, pero la piscina se veia grande. La atención es muy buena, en todo momento disponibles por teléfono o WhatsApp, y por si fuera poco, tienen un DETALLAZO con los más pequeños llevándoles a una granja a que cojan huevos de las gallinas y vean más animales. Una experiencia inolvidable. Repetiremos en un futuro. Gracias.