Fuimos tres familias con niños. La verdad que la casa está fenomenal. Muy práctica para poder reunirnos todos juntos.
La dueña, muy atenta, nos recibió con un detalle de bienvenida (dulces de la zona, una botella de vino y una bolsa de gominolas para los niños) que nos sorprendió porque no es habitual.
Durante toda la estancia muy pendiente de lo que pudiéramos necesitar.
Algo a destacar, es que las camas son cómodas. Que normalmente te levantas peor de lo que te acuestas por el colchón.
Además cuenta con un patio donde los niños pueden jugar o se puede hacer una barbacoa.
Con ganas de repetir.
Muy recomendable
La dueña, muy atenta, nos recibió con un detalle de bienvenida (dulces de la zona, una botella de vino y una bolsa de gominolas para los niños) que nos sorprendió porque no es habitual.
Durante toda la estancia muy pendiente de lo que pudiéramos necesitar.
Algo a destacar, es que las camas son cómodas. Que normalmente te levantas peor de lo que te acuestas por el colchón.
Además cuenta con un patio donde los niños pueden jugar o se puede hacer una barbacoa.
Con ganas de repetir.
Muy recomendable