Nuestra estancia en las Casucas no podía haber ido mejor. Los niños se hicieron amigos desde el primer día con el resto de niños de las otras casas y no paraban ni un segundo, jugando, dando de comer a los animales, aprendiendo con Javier y Belén de todo sobre la vida en el campo. Y como en la parcela de las casas no hay peligro alguno, pues estábamos tranquilos y encantados. La única pega es que nunca querían irse y cuando nos íbamos a hacer turismo siempre querían volver pronto:D.
Las casas son de madera, muy bonitas, limpias y perfectamente equipadas. Y ¿qué decir del trato de los anfitriones, Javier y Belén?...pues una maravilla, encantadores con los niños y con los adultos, dispuestos a ayudar con cualquier cosa y siempre enseñando a los chavales cosas sobre la huerta, los animales y la naturaleza en general. En resumen: las casas perfectas para unas vacaciones en familia. ¡Gracias por todo, Javier y Belén! María, Michael, David y Sofía.
Las casas son de madera, muy bonitas, limpias y perfectamente equipadas. Y ¿qué decir del trato de los anfitriones, Javier y Belén?...pues una maravilla, encantadores con los niños y con los adultos, dispuestos a ayudar con cualquier cosa y siempre enseñando a los chavales cosas sobre la huerta, los animales y la naturaleza en general. En resumen: las casas perfectas para unas vacaciones en familia. ¡Gracias por todo, Javier y Belén! María, Michael, David y Sofía.