Casa perfecta: cuidada estética rural, baño en cada habitación, cocina con todo lo que puedas necesitar, un amplio salón con una preciosa chimenea típica de la zona. El jardín y la enorme barbacoa nos permitió disfrutar del verano 2015 y que la estancia fuera una delicia. Serafin, el perfecto anfitrión y un tipo excepcional.