Vistas impresionantes del pueblo desde el alojamiento, clima estupendo nada de frio ni de día ni de noche, aunque en general este mes de octubre ha sido caluroso en otras zonas hay mucho cambio de temperatura por la tarde noche y a veces los niños lo acusan sobre todo los que venimos de la costa.
Otra cosa merece la pena hacer la ruta de senderismo por la rambla de los yesos no es demasiado larga aunque no apta para niños muy pequeños, se hace en una mañana y al medio día estas en el alojamiento para descansar.
Nos ofrecerierón la posibilidad de hacer catas de vinos en la bodega pero como llevavamos niños no fuimos aunque me quede con ganas de hacerlo.
Otra cosa merece la pena hacer la ruta de senderismo por la rambla de los yesos no es demasiado larga aunque no apta para niños muy pequeños, se hace en una mañana y al medio día estas en el alojamiento para descansar.
Nos ofrecerierón la posibilidad de hacer catas de vinos en la bodega pero como llevavamos niños no fuimos aunque me quede con ganas de hacerlo.