El pueblo de Burg es de cuento, pasear por sus calles te traslada al pasado, el silencio, la tranquilidad y ese olor a leña quemada que sale de cada chimenea es....
El apartamento tiene de todo no le falta detalle alguno y la limpieza es genial, el trato de los propietarios es exquisito gracias Fede y M José, volveremos sin duda, los perros han disfrutado del entorno otoñal, una preciosidad.
El apartamento tiene de todo no le falta detalle alguno y la limpieza es genial, el trato de los propietarios es exquisito gracias Fede y M José, volveremos sin duda, los perros han disfrutado del entorno otoñal, una preciosidad.