Fuimos un grupo de amigos y estumos genial. La gerente nos atendió amablemente y nos ayudó en todo, además nos regaló una caja de cerezas. La casa súper limpia, con todo tipo de comodidades y las instalaciones muy cuidadas y pensadas para disfrutar y descansar. Nada estaba roto ni desvencijado. Las sábanas de una calidad como nunca había visto en ningún hotel de lujo y nos dio total confianza para usar la piscina y la barbacoa. Volveremos seguro. Y lo recomendamos a todo el mundo. Si van, no dejen de comprarles cerezas!!!