Qué ver en Artajona

Como villa de eminente valor histórico, uso hasta el año 1423 sello en el que figuraban una encina y a sus dos lados unas aves; sello que le otorgo Carlos III, para que lo usara en sus blasones: “en la forma et manera que usan en sus blasones las otras buenas villas de este nuestro regno de Navarra”

La época mas importante de esta villa fue el medievo, porque en ella se construyo el famoso cerco amurallado, la fortificación mas importante de Navarra. Tiene una forma irregular arriñonada con nueve torres cúbicas.

Los dólmenes de Artajona dan buena cuenta de la antigüedad de esta villa, son dos sepulcros monumentales de la época prehistórica.

Corona la vista de este pueblo la iglesia de San Saturnino, es una iglesia-fortaleza de estilo gótico, tiene un interesante tímpano gótico, donde esta representado San Saturnino, La Reina Juana de Navarra y su esposo Felipe el Hermoso, y en su interior un retablo magnifico con pinturas de comienzo del renacimiento, y una torre que se utilizaba como puesto de guardia y también servia de calabozo, posee también un pozo de agua en el sotocoro.

La iglesia de San Pedro de construcción gótica, pero con varias reformas hechas en los S XVII y XIX, están realizadas en cobre esmaltado, y posee en la sacristía un magnifico tríptico flamenco representando la epifanía.

En las afueras de la villa hay una basílica de nuestra Señora de Jerusalén, edificio barroco que custodia una imagen de la Virgen ejemplar único de orfebrería navarra.
Talla procedente de Limoges, Francia, y que según la tradición parece que llego a Artajona traída por un cruzado artajonés que venía de Tierra Santa.

Como consecuencia de esto las fiestas mas importantes son las que se celebran en homenaje a sus patrones, la Virgen de Jerusalén y que terminan con una romería a la ermita de San Bartolomé.

Hay por Navidad en Artajona un tradicional postre confeccionado con almendras y miel, en forma de obleas llamado “turrón royo”.