Qué ver en Valdemorales
El núcleo está situado en lo más profundo de un valle. El término se extiende sobre la sierra de Montánchez, presentando dos alineaciones separadas por un valle abierto en la zona central. La oriental es más áspera que la occidental, y está formada por las siguientes alturas: Cancho de la Racha, Cancho del Águila, cerro de San Cristóbal (841 m.) y cerro Limón. En la occidental destacan el cerro del Pajar (609 m.) las Torrecillas (697), el Cañazo (532), Homero (521), Acebuchal y Cabeza Noguera (589). El valle donde se asienta el núcleo es utilizado como pequeño portezuelo para salvar un desnivel de unos 200 m. y acceder a la penillanura Trujillano-Cacereña desde las Vegas Altas del Guadiana. La mayor parte del terreno municipal presenta pendientes superiores al 20 por 100.
Bañan el término los arroyos de Santa Ana y los regatos de Cañazo y del Cañizo.
El clima es de tipo mediterráneo subtropical. La temperatura media anual es de 16,2ºC. Los inviernos suelen ser suaves, con una temperatura media de 8,0ºC, alcanzando las mínimas absolutas valores de -4ºC. El verano es seco y caluroso con una temperatura media estacional de 26ºC y unas máximas absolutas que alcanzan los 40ºC. La precipitación media anual es de 600 mm., siendo la estación más lluviosa el invierno y la más seca el verano.
La formación vegetal autóctona es del tipo durilignosa, con un bosque esclerófilo mediterráneo representado por la encina y el alcornoque, junto a otras especies que componen el matorral como la jara, aulaga, cantueso, etc.
La tasa de actividad en 1986 es baja, con un valor del 33,3 por 100. En la distribución por sectores se aprecia un predominio del agrario que acoge al 68,7 por 100 de los activos, seguido por los servicios (19,2 por 100), la construcción (7,8) y la industria (4,3 por 100).
La vocación de los suelos, desde el punto de vista agrario, es de tipo ganadero, ya que el bosque mediterráneo, con matorral a veces muy denso, ocupa casi el 80 por 100 del término municipal. La superficie labrada representa sólo una tercera parte, destacando entre los cultivos el olivar y la higuera.
Al ser escasa la superficie municipal, la ganadería no es muy importante, destacando el ovino y bovino.
El único edificio destacable es la iglesia de San Andrés, edificación de planta rectangular de una sola nave dividida en cuatro tramos por arcos fajones sobre pilares. Las bóvedas y los arcos se derrumbaron en 1977 y se sustituyeron por una techumbre moderna. El presbiterio se cubre con cúpula sobre pechinas.
La sacristía se adosa en el lado de la epístola, cubierta con bóveda de aristas. En el mismo lado, pero a los pies, se situaba la torre, de planta cuadrada y dos cuerpos de alzado. El templo tenía dos accesos, en el lado del evangelio y en el oeste, ambos adintelados. La obra se realiza en mampostería con refuerzos de granito en el s. XVII. Escasas piezas de interés conserva esta parroquia, entre ellas destaca un pequeño retablo barroco del XVIII que cobija una talla de San Antonio de la misma centuria.
