Acogedor y muy bien equipado: Jabones de manos y para la ducha. Juegos para niños y mayores. Varios juegos de vasos, tazas, platos... Menaje para cocinar. Tontunas de comida de las que se te olvida siempre alguna (azucar, sal, aceite, harina...).
Los caseros un encanto.
El pueblo a poca distancia, el paseo de Plazaola nada mas salir en la puerta de la casa.
Paisajes increíbles hace que sea un entorno idílico. Muy amables y simpáticos los dueños. Un fin de semana inolvidable. Nos hubiera gustado quedarnos más tiempo.
Los caseros un encanto.
El pueblo a poca distancia, el paseo de Plazaola nada mas salir en la puerta de la casa.