Qué ver en Calella

Históricamente, Calella, situado en la costa, muy al norte de la provincia, ha sido un municipio receptor de todo tipo de visitantes turísticos. Alemanes, holandeses, daneses, ingleses o franceses. Es tal la importancia de los turistas en el municipio, que en época estival, la población, de 18.000 habitantes, puede llegar a multiplicarse hasta por tres.

¿Qué convierte a Calella en un municipio tan interesante? Hay varias razones. En primer lugar el faro de la playa, construido en el 1859. Las antiguas torres de telégrafo, conocidas como Las Torretes, la biblioteca o el Museo Archivo son puntos de atención turística que atraen a turistas tanto nacionales como internacionales.

No hay que olvidar tampoco el Calella – Oktoberfest, una fiesta en la que participan ciudadanos de más de 10 países, un punto de encuentro de músicos que cada año atrae a más personas, no solo del pueblo, sino de toda la provincia.

Calella se ha convertido en un lugar fantástico para viajar en familia. Son muchos los lugares pensados para el ocio de los niños: club infantil, áreas de juegos, brazaletes para su identificación… Son muchas las actividades para ellos que se organizan tanto en la piedra como en otras zonas del pueblo.