Hoteles en Salamanca

Conocida por ser una importante ciudad universitaria, siempre hay vida en este núcleo urbano. Su casco histórico con sus callejuelas de piedra te enamorará, en pleno casco antiguo se encuentra la Plaza Mayor, un importante lugar de tránsito y de edificios históricos por la que da gusto pasear.Salamanca lugar de peregrinaje por muchos católicos y amantes de la arquitectura, es la única ciudad en el mundo que posee dos catedrales, una más antigua y otra más nueva. Ambas se encuentran en el casco viejo de la ciudad, la más antigua de estilo gótico construida a partir del siglo XVl se muestra en plena consonancia con la Universidad y sus callejuelas. Una oferta turística a la que se han sabido adaptar los hoteles de la zona, habilitando servicios para el profundo relax de los viajeros, y a la que se han sumado las casas rurales en Salamanca. La Universidad de Salamanca reconocida a nivel internacional por su prestigio, es una de las 4 universidades más antiguas de Europa, y a su vez una joya del arte renacentista en España.Ente los edificios más nobles, que merecen una visita se encuentran: El Palacio de Anaya, de claro estilo neoclásico y que ahora alberga la facultad de Filología, con una importante biblioteca a la que pueden acceder los estudiantes de la ciudad; El Palacio gótico de la Salina cerca de la universidad pontificia y El Palacio Monterrey, uno de los edificios más notables de Salamanca declarado Monumento Nacional en cuyo interior hay cientos de obras de arte.También tiene una amplia variedad de museos, como es el Archivo General de la Guerra Civil Española, el Museo Art Deco y Art Nouveau, donde se muestra una gran colección que incluye desde juguetes hasta muebles.No obstante Salamanca también tiene numerosos municipios de interés y atracción, elegidos por aquellos viajeros que quieren disfrutar de un entorno natural donde el jacuzzi es el punto de atracción, así como otras instalaciones para el verano. Por esta tierra, han pasado personajes nobles desde la literatura hasta la vida real, como la figura de Lazarillo de Tormes o del propio Unamuno, que dispone de una Casa dedicada a su persona con múltiples objetos y libros.