Casas rurales en Distrito de Vila Real

Fronterizo con Galicia, este distrito al norte de Portugal es probablemente uno de los destinos portugueses que mejor conserve su personalidad, su encanto. Muchos viajeros, atraídos por los paisajes norteños, elijen este destino como lugar de vacaciones y zona ideal para hacer lo que más les gusta, practicar el turismo rural por unas calles que siguen conservando su parte de historia y de melancolía que enamora a los viajeros rurales.

El río Duero, responsable de uno de los mejores vinos de Portugal, conquista no sólo con sus vistas y paisajes a todo tipo de turistas, amantes de la naturaleza o sencillamente descubridores de nuevos lugares con encanto, sino que además, para los paladares más exquisitos, el caldo que estas vides dan, les dejará un gran sabor de boca…

Y de la naturaleza a su arquitectura. Casas del siglo XV que conservan las fachadas impolutas, dan a la ciudad esa imagen de notoriedad mezclada con humildad, creando una atmósfera difícil de encontrar en cualquier otra zona de Portugal. Se trata de un distrito en el que sus habitantes conviven con los turistas llegados de cualquier parte del mundo, compartiendo con ellos la belleza y espontaneidad de un distrito vivo.

Para seguir disfrutando de la naturaleza, pero en esta ocasión también de la diversión está el parque multiaventura A Botica do Lazer. Ambientado con temática celta, niños y mayores tendrán la posibilidad de pasar un día lleno de entretenimiento y practicando actividades de las que no se puede gozar en todos los sitios: paintball, segway, tirolina, escalada…

Y para quienes prefieran una estancia más tranquila, el pueblo de Chaves, en el norte del distrito, encontrarán las aguas termales que han relajado a miles de personas desde tiempos de los romanos.