Pasamos un fin de semana con algunos amigos y debo decir que es una de las mejores casas rurales en las que he estado, está extraordinariamente bien equipada y no le falta nada. Matías, el dueño, es una gran persona y muy atento a todo. Es un lugar perfecto para pasar un fin de semana tranquilo y relajado, y para explorar la tierra de Don Quijote.