Francamente recomendable, casas muy acogedoras y decoradas con muy buen gusto. Tanto los jardines, como el entorno, los animales de la granja, etc...,hacen que la estancia sea muy agradable para niños y adultos, y si a eso se le añade el comportamiento y atenciones exquisitas de los propietarios pues miel sobre hojuelas. Si no fuera porque en nuestro animo siempre existe descubrir nuevos sitios lo instituiríamos como sede rural oficial.