La estancia en la casa ha sido espectacular. Empezando porque la casa está completamente reformada (y decorada con mucho gusto). La piscina climatizada ha sido un lujo increible, sobretodo teniendo -2 grados al exterior. Disponen de billar y dardos y un grandísimo jardin donde puedes echarte unas pachangas de futbol. El salón dispone de grandes sofás y bastantes sillas donde se puede estar muy cómodo. También tienen una zona de barbacoa (de gran calidad) y horno de leña con su nevera y baño incluidos para mayor comodidad. Lo único, la leña merece la pena comprarla (7€) en un market que hay a la entrada del pueblo (ellos ofrecen un pack de cortesía de 10kg pero si usáis mucho tanto el horno como la bbq no son suficientes). También dejan hacer el check out a las 17:00 del domingo, y no te fuerzan a dejar la casa a las 12:00 como en otras casas rurales. Las habitaciones son muy cómodas y están pensadas tanto para ir en grupos de parejas, como con amigos y familia. Sin duda, volveremos.