Es una casa espectacular, muy acogedora con todas las comodidades necesarias y en un entorno súper bonito. Con respecto a Mikel y Edurne decir que son unos craks, muy serviciales y más agradables y cariñosos. Si estás por esa zona no dudes en acercarte y comprobarlo tu mismo. Nosotros repetiriamos cpn los ojos cerrados. Enhorabuena.